Vivir en comunidad siempre requiere un mayor nivel de adaptación que hacerlo de manera independiente ya que deberás compartir espacios y zonas comunes con todos los vecinos.
Al comenzar a formar parte de una comunidad de vecinos pueden surgir ciertas dudas, sobre todo aquellas ligadas al ámbito económico, como es el pago de las famosas derramas.
La Ley de Propiedad Horizontal, comenta que la derrama de una comunidad es una cuota extraordinaria que se recauda para hacer frente a un determinado gasto que no estaba previsto entre los gastos comunes y corrientes de la comunidad.
Los aspectos más habituales que cubren las derrama de las comunidades son:
- Solución de humedades o de plagas
- Arreglos de desperfectos en la fachada del edificio
- Reparación o instalación de ascensores
- Renovación o cambios de las instalaciones eléctricas
- Mejoras en las tuberías
Hay que tener en cuenta que es obligatorio pagar la derrama por parte de todos los propietarios de viviendas que conforman el edificio, salvo que un juez autorice la suspensión de dicho pago. Los acuerdos adoptados por la comunidad de propietarios, desde que se aceptan favorablemente y se cierra el acta, han de ser cumplidos por todos los propietarios.