Tiene 68 metros cuadrados, tres habitaciones y un baño. Tendedero, hall y un balcón. Se trata de un piso ubicado en un edificio de cuatro alturas, sin ascensor, situado en el distrito de Vicálvaro, en Madrid. El propietario es Bankia y lo vende por 64.000 euros, un 40% más barato que su precio inicial. La oferta está disponible hasta el próximo 26 de mayo. El único inconveniente es que hay okupas dentro y tendrá que ser el comprador el que se haga cargo de echarlos del inmueble.
Bankia acaba de poner a la venta un paquete de 300 viviendas casi a mitad de precio, entre las que incluye inmuebles okupados e, incluso, tapiados. Así consta en el listado de pisos que aparece en el portal inmobiliario de la entidad a través del cual el banco los comercializa. No obstante, la entidad no oculta la situación y advierte de que los inmuebles tienen unas «condiciones específicas» que «deberán ser expresamente aceptadas por el adquirente en el contrato de compraventa».
«El inmueble se transmite ocupado ilegalmente por terceros (okupas)», reconoce el banco en la ficha de la vivienda. Es más, deja claro que Bankia «no responde ni de los vicios o defectos ocultos, ni del estado de conservación del inmueble».
En cuanto al estado del piso, «ocupado», la entidad advierte de que si, a fecha de la venta, el banco hubiese demandado judicialmente la ocupación será el comprador el que deberá subrogarse en dicha demanda y mantener indemne al vendedor, en referencia a Bankia. Es por ello que el precio de venta del inmueble es menor.
INMUEBLES TAPIADOS
En el paquete de viviendas ofertadas se encuentran también inmuebles tapiados. Dicho de otra manera, pisos que tienen el acceso bloqueado. Es el caso de una vivienda en la Villa de Vallecas, en Madrid. Un total de 69 metros cuadrados, tres habitaciones y un baño. Sin ascensor. «El inmueble se encuentra tapiado», advierte con claridad el banco en la web, donde deja constancia también de que no está «obligado a modificar dicha situación».
Es más, sorprende el hecho de que reconozca que tampoco tiene la obligación de «dar acceso al mismo al interesado en ningún momento». En este sentido, Bankia deja claro que el comprador tendrá que renunciar a «defectos o vicios» que existan en el piso, así como a indemnización o reclamación por el estado u ocupación del inmueble.
Precisamente, por ello, el precio de la oferta es más barato, ya que el banco consideró el estado físico en que pueda estar el piso. El ejemplo en cuestión cuesta 50.000 euros.
Consultamos las páginas web de otras entidades para comprobar si venden viviendas ocupadas, pero ninguno de los portales consultados ofrece una ficha detallada del inmueble, como ocurre con Bankia, explicando la situación de la vivienda. Así, el caso de Servihabitat, de CaixaBank, da la opción de excluir los inmuebles que están a la venta pero no se pueden visitar. No obstante, no concreta que estén ocupados. Fuentes financieras reconocieron que hay bancos que tienen pisos ocupados, pero no los venden deliberadamente.
«Hay ocasiones en las que el comprador se interesa por un inmueble que consideramos vacío, pero cuando vamos a enseñarlo está ocupado», explicaron fuentes financieras. En ese caso, «el problema sirve para hacer un descuento adicional en el precio». En palabras de un portavoz financiero, «el drama que está viviendo España y el stock de viviendas que tiene la banca, hace imposible que podamos controlar este problema».
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