El fichero FICO fue desarrollado por IBM España para ICEA (Investigación Cooperativa entre Entidades Aseguradoras), y consiste en un sistema de intercambio de información entre aseguradoras de los datos de siniestralidad de las Comunidades de Propietarios de España.
Sólo pueden acceder a esta información las Entidades Aseguradoras que están adheridas y a su vez facilitan información de pólizas de su cartera que han sido anuladas, por decisión de la compañía de seguros, por alta siniestralidad. El concepto “alta siniestralidad” representa alcanzar un ratio superior al 90% en pagos de siniestros con respecto a la prima neta (precio del seguro sin tasas ni impuestos) que se paga por el seguro. Gasto para la compañía de seguros es todo desembolso realizado con motivo de un siniestro y engloba los servicios de peritación, reparación, gastos externos e internos etc. En el fichero FICO participan en la actualidad 14 entidades, con una cuota de mercado del 71% y, hasta la fecha, se ha mostrado como una herramienta muy útil para la mejora de resultados del sector y control de aquellos riesgos deficitarios.
¿Cómo sabe una comunidad si está incluida en este fichero?
Normalmente, una Comunidad de Propietarios no sabe que lo está hasta que trata de suscribir un nuevo seguro multirriesgo y su mediador le informa de que alguna aseguradora no acepta su riesgo o bien el precio estándar tiene que incrementarse, en concreto por estar incluida en ese fichero, o bien, que no se incluirán determinadas coberturas.
Las coberturas que habitualmente son excluidas son:
⇒ Daños por agua: es la causa de siniestros más frecuentes en las comunidades de propietarios, además de los hechos accidentales, otros muchos tienen su origen en el deficiente mantenimiento de las instalaciones generales y particulares. Estos, y otros tipos de problemas, son difíciles de detectar a priori, por lo que las aseguradoras han buscado otros métodos para conocer mejor los riesgos que aseguran, como consultar el fichero FICO y verificar “in situ” el estado del edificio.
⇒ Responsabilidad Civil derivada de daños por agua. Cuando se rompe u obstruye una tubería se causan daños al propio edificio y a terceros.
⇒ Responsabilidad Civil derivada de desprendimientos de elementos de la fachada, balconadas, cubiertas, alerones etc.
Si tu Comunidad de Vecinos ha tenido varios siniestros atendidos por la Compañía de Seguros y habéis recibido una carta de cancelación del seguro (por un medio fehaciente y dirigida al domicilio que figure en el contrato, con dos meses de antelación al vencimiento), lo más probable es que pase a estar incluida en este fichero (hay que tener en cuenta que la información es borrada del fichero a los dos años desde la fecha de anulación de la póliza).
Pero, ¿qué podemos hacer para no vernos perjudicados con un aumento de la prima e imposibilidad de contratar con otras compañías? Con el objetivo de limitar el número de partes que damos a la aseguradora, de modo preventivo podemos hacer lo siguiente:
⇒ Evaluar o consultar previamente a la Correduría de Seguros, si el siniestro está cubierto por la póliza antes de dar parte a la aseguradora, si se informa del mismo, aunque no esté cubierto, contará como un “siniestro” más, porque se activa el servicio, se generan gastos generales, interviene un servicio de asistencia y probablemente ha sido visitado por el perito o profesional correspondiente. Sin que sea un dato exacto, este proceso puede acarrear un coste para la aseguradora en torno a 300 euros, que se contabilizan en el historial de siniestralidad.
⇒ Si no se puede determinar si el siniestro es debido a un elemento común o privativo, preferiblemente que se dé el parte desde el seguro de la vivienda particular, ya que éste acumulará menos siniestralidad.
⇒ Dar parte al seguro de daños que no le corresponden, repercute en el aumento de la prima anual así como en las coberturas, con imposición de franquicias o exclusiones. En definitiva incrementa el presupuesto anual de la Comunidad de Propietarios.
⇒ No olvidar que tener las más amplias coberturas son de vital importancia en siniestros de gran magnitud. La función del seguro es atender hechos accidentales que afecten al patrimonio y bienestar de las personas, no confundirlo con un contrato de mantenimiento.
La asesoría de una correduría de seguros es de vital importancia para conocer y contar con las mejores prestaciones de un seguro multirriesgo para la comunidad, y saber cuándo podemos y debemos recurrir a él. Tampoco podemos olvidar para la prevención de siniestros, la importancia del mantenimiento y de las obras de rehabilitación en edificios. El paso del tiempo y el uso hacen que, inevitablemente, los edificios se deterioren y que sea necesaria su reparación: la rotura de una bajante, el ascensor que deja de funcionar o la fachada que amenaza con derrumbarse en cualquier momento.
Con buen mantenimiento y rehabilitación evitaremos siniestros más importantes y costosos en el futuro, y por lo tanto, se reducirá el número de partes a nuestra aseguradora y la probabilidad de entrar en este fichero FICO. La instalación de cámaras de vigilancia en la Comunidad de Vecinos reduce los siniestros por robo y vandalismo, por lo que también es una buena alternativa para reducir el número de partes al seguro.
Fuente: José Silva www.prevent.es