Adquirir una vivienda implica mucho más que asumir una hipoteca. Existen numerosos costes adicionales y tributos que deben pagarse para cerrar la operación y convertirse legalmente en propietario.
Desde la tasación del inmueble hasta los honorarios notariales, el registro de la propiedad y los impuestos correspondientes, los especialistas aconsejan contar con un ahorro previo equivalente al 10% o 12% del valor del inmueble.
A continuación, te explicamos en detalle cuáles son estos gastos vinculados a la compraventa de una vivienda y cuál es su importe estimado en 2025.
¿Qué gastos implica comprar una vivienda?
Si planeas comprar una casa en 2025, es importante tener en cuenta una serie de gastos adicionales más allá del precio del inmueble. Estos son los principales:
Honorarios notariales al comprar una vivienda
Tanto si se trata de una vivienda nueva como de segunda mano, uno de los costes que deberás asumir es el del notario. Sus tarifas, conocidas como aranceles, están reguladas por el Estado, por lo que no varían entre notarios para un mismo servicio.
En términos generales, estos honorarios representan entre el 0,2% y el 0,5% del valor del inmueble.
Por ejemplo, la firma de la escritura pública de compraventa suele costar entre 600 y 875 euros, dependiendo del precio de la vivienda. Así, por una propiedad de 100.000 euros se pagarían unos 850 euros, mientras que para una de 250.000 euros el coste puede rondar los 1.000 euros.
Coste del Registro de la Propiedad
Otro gasto obligatorio es la inscripción de la vivienda en el Registro de la Propiedad. Este trámite da validez legal a la compraventa y también tiene un coste regulado.
El precio varía según el valor del inmueble y suele oscilar entre el 0,1% y el 0,25% del mismo. En la práctica, se traduce en un desembolso de entre 400 y 650 euros aproximadamente.
Gastos de gestoría
A diferencia de los anteriores, la gestoría es un gasto opcional. Puedes contratar a un profesional o empresa para que se encargue de gestionar los impuestos y trámites administrativos relacionados con la compra.
Aunque no es obligatorio, suele ser habitual cuando se solicita una hipoteca. El precio de este servicio ronda los 300 euros, pero no está regulado, ya que se trata de un servicio libre.
Tributos asociados a la compra de una vivienda
Quien adquiere una vivienda debe contar con un presupuesto adicional para hacer frente a los impuestos correspondientes. El importe variará según el valor del inmueble y si se trata de una vivienda nueva o de segunda mano.
En el caso de las viviendas nuevas, el principal impuesto a pagar es el IVA, que en 2025 representa el 10% del valor reflejado en la escritura. Sin embargo, en Canarias se aplica el IGIC (Impuesto General Indirecto Canario), con un tipo reducido del 6,5%. Para las viviendas de protección oficial, el IVA puede reducirse hasta el 4%, aunque esto depende de la comunidad autónoma y del tipo específico de vivienda social.
Además del IVA, el comprador también debe abonar el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (IAJD), cuyo porcentaje varía en función de la comunidad autónoma.
Impuestos en la compra de una vivienda de segunda mano
En el caso de adquirir una vivienda de segunda mano, el impuesto principal que se debe abonar es el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP). Este impuesto se calcula aplicando un porcentaje sobre el valor escriturado del inmueble, y su tasa varía según la comunidad autónoma. Por lo general, este porcentaje oscila entre el 6% y el 10%.
Fuente «Idealista»