La fiebre por la piscina comunitaria vuelve a las juntas de propietarios. Un reportaje de El País revela que disponer de este equipamiento puede encarecer el precio de una vivienda entre un 3 % en Madrid y un 59 % en Barcelona, con una horquilla media del 15 % para pisos y del 18 % para chalets. Algunos administradores elevan la estimación hasta el 20 % en zonas cálidas donde la temporada de baño se alarga.
¿Cuánto cuesta construirla?
El presupuesto de obra ronda los 900 €/m². En una finca tipo, el desembolso puede superar los 2.500 € por vecino solo para reformar una piscina existente; partir de cero añadiría 2.000 € extra.
El peaje del mantenimiento
Mantener 150 m² de lámina de agua abierta de mayo a octubre supone 5.000 – 7.000 € anuales (productos, depuradora, analíticas, limpieza diaria) más 150 – 1.000 € al mes de servicio externo, a lo que se añade el salario del socorrista cuando la normativa lo exige.
Mayorías y quién paga
Para aprobar la obra se necesita el voto favorable de las tres quintas partes de cuotas y propietarios. Si la piscina se considera “servicio de interés general”, todos los vecinos sufragan coste y mantenimiento—even quienes votaron en contra—; si se clasifica como “mejora de lujo” y supera tres mensualidades ordinarias, los disidentes pueden librarse del pago, pero también del uso hasta ponerse al día.
Obstáculos habituales
- Espacio y estructura: no todas las azoteas resisten el peso ni el ruido de la depuradora.
- Conflictos vecinales: ruidos, horarios, invitaciones y morosidad suelen tensionar la convivencia.
- Riesgo jurídico: una impugnación puede forzar a desmontar la instalación si el acuerdo no se ajusta a la Ley de Propiedad Horizontal.
Rentabilidad extra: alquiler por horas
Plataformas como Coco Pool permiten alquilar piscinas privadas a terceros, con ingresos medios de 4.000 € por temporada — hasta 10.000 € en algunos casos —, lo que anima a propietarios de chalets a amortizar la inversión.
Recomendaciones de Soluciones y Mediaciones
- Estudio de viabilidad técnica: antes de votar, encargamos un informe estructural y acústico; evita sorpresas y derribos posteriores.
- Proyección de costes y derramas: simulamos varios escenarios (con socorrista, sin él, temporada reducida…) para que cada vecino conozca su cuota real.
- Clasificación jurídica clara: dejamos reflejado en acta si la piscina es “servicio de interés general” o “mejora” y sus consecuencias sobre el reparto de gastos.
- Reglamento interno ad hoc: horario, número de invitados, normas de higiene y sanciones por morosidad; la prevención minimiza conflictos.
- Plan de explotación opcional: asesoramos sobre alquiler horario o cursos de natación para generar ingresos que compensen el mantenimiento.
¿Tu comunidad se debate entre zambullirse en la obra o dejarla en remojo? Soluciones y Mediaciones te ayuda a tomar la decisión con cifras, informes técnicos y un marco legal sólido.
Fuente: El País