A todos nos alegra si a final de mes nos llega una factura con un precio más bajo de lo esperado. Una manera de ahorrar dinero en el consumo de energía, luz sobre todo, es el autoconsumo.
El pasado mes de abril se aprobó el decreto ley que anulaba el impuesto del sol, una tasa que se tenía que pagar si querías instalar paneles solares. Ahora el Gobierno permite la instalación de placas solares para el autoconsumo y que varios edificios se beneficien de esa energía producida.
Con esto se da un paso adelante para superar la hegemonía de las eléctricas. Ahora uno podrá producir su propia energía y, si produce en exceso, cederla a la red eléctrica y recibir una paga por ella. Estamos ante una nueva era. Además, se han simplificado los trámites para instalar placas fotovoltaicas. Con estos cambios en la legislación España consigue acercarse a los estándares europeos en cuanto al autoconsumo. Curioso que estuviésemos a la cola siendo un país con horas de sol en exceso en comparación con el resto del continente.
¿Cuánto tiempo se necesita para instalar las placas?
La instalación en sí puede durar una semana, pero como que se tienen que hacer otras gestiones previas el proceso puede tardar un mes, pudiendo variar dependiendo de la potencia que se quiera instalar y del municipio. José Donoso, director general de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), ha señalado a este respecto: “Se puede buscar una empresa instaladora, que también en muchos casos se encarga de la financiación”. La compañía instaladora se encarga de realizar un análisis técnico, de manera que, si la instalación no supera los 15 kilovatios (kW), tan solo es necesario un permiso de obra de la que se hace cargo la propia compañía.
¿Cuánto cuesta la instalación?
Según Donoso, los precios que rondan llevar a cabo la instalación bailarían entre los 3.000 y 6.000 euros en el caso de una vivienda unifamiliar que no precisara más de 4,5 kW contratados. Una instalación de 1,5 o 3 kW y entre 6 y 12 placas es más que necesario para este caso y generará un tercio del total del consumo doméstico ya que no se puede aprovechar la energía solar las 24 horas del día. En cuanto a la vida útil de la instalación, cabe señalar que dura algo más de veinte años; así, una pyme amortizará la estructura en un periodo comprendido entre los cuatro y seis años y, en el caso de una vivienda, los tiempos de amortización superarán los diez años, explica Donoso.
¿Sale a cuenta?
Si sale a cuenta económicamente o no instalar paneles solares para el autoconsumo dependerá de la visión a largo plazo que tengamos. La inversión que supone la instalación es alta, pero a la larga siempre se acabará recuperando. En caso de viviendas unifamiliares será más arriesgado todo, pero en el caso de una comunidad de vecinos la inversión se divide. Eso sí, también se dividirá el ahorro.
Fuente: Que.es
Imagen: Aura energía